"Colono" proviene del latín "colonus" (labrador), que a su vez deriva de "colere" (cultivar). Así, la persona que se establece en un lugar para trabajar en él sería un "colono", y "colonia" dicho lugar o territorio. Por extensión, y así lo recoge en su diccionario la Real Academia Española, otra de las acepciones de "colonia" es el territorio fuera de la nación que lo hizo suyo; y abundando aún más, el territorio dominado y administrado por una potencia extranjera. En todo caso, "colono" sería el habitante de uno cualquiera de esos lugares o territorios.